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Entrevista:ALEJANDRO VALVERDE | Corredor de la selección española | Mundial de ciclismo

"Yo no tengo que callar bocas"

Carlos Arribas

Desde la habitación de Alejandro Valverde se ve el chorro y el lago, los dos ahí, a sus pies, el paisaje de Lugano que tanto obnubila a Carmen Cervera y otros nobles de palacetes y lanchas fuera borda de madera, pero no parece que Valverde, chándal rojo, voz cansada, haya decidido tomar hotel en el lago suizo para disfrutar de las vistas y del chorrito. "Y, además, yo no he sido el que ha pedido el cambio de hotel", dice el ganador de la última Vuelta, de 29 años, que mañana intentará ganar su primer maillot arco iris en el circuito de Mendrisio, duro, dos fuertes cuestas, situado a apenas 15 kilómetros del hotel español.

Pregunta. Decía el otro día su director, Eusebio Unzue, que parece que a usted le está vedado el placer de disfrutar de lo que ha hecho. Aún suenan los aplausos del podio de La Castellana por su Vuelta cuando se arma la polémica del hotel del equipo, del apaño de última hora para evitar pisar Italia, del recuerdo de que el Tribunal Arbitral del Deporte (TAS) tendrá que decidir aún si se le sanciona o no...

"Es un Mundial bueno para mí. Entre Samuel Sánchez y yo, yo soy más rápido"

Respuesta. Polémica no ha habido más que la que la prensa ha querido armar. No hay más cosa de la que había antes y durante la Vuelta...

P. Pero la prensa no ha sido la que ha decidido cambiar de hotel y de país a última hora...

R. Eso ha sido una cosa que quizás habría que haber hecho antes, pero no es un cambio propuesto por mí, sino por la selección para buscar la mayor tranquilidad de todo el equipo, la mía, primero, pero sabiendo que si se me está incordiando a mí eso puede repercutir en la selección.

P. ¿Ha influido esta situación en su estado de ánimo?

R. No, no... No me ha quitado el sueño ningún día porque no ha habido ninguna novedad que pudiera quitarme el sueño. He disfrutado muy bien de mi victoria en la Vuelta. Totalmente tranquilo, aunque la prensa lo haya movido. Tantas veces lo ha movido y tanto follón han armado que eso ya no es nada.

P. Pero tendrá ganas de que esto acabe, de que el TAS decida...

R. Hombre, claro que si no hubiera este jaleo estaría más tranquilo, pero tampoco es muy importante.

P. ¿Piensa que si todo va bien puede empezar de cero el año próximo?

R. Ya me gustaría a mí empezar de cero, pero hay gente que está empeñada en molestar, porque eso es molestar, cuando pienso que ya está suficientemente demostrado que pese a todo el follón que me han dado más no se me puede pedir.

P. Llega al Mundial, una asignatura pendiente desde que terminó segundo en 2003, después de ganar la Vuelta, otra obligación insatisfecha hasta ahora desde el mismo año. ¿Le da mucha tranquilidad o más ansiedad?

R. Vengo más motivado y más relajado. Sé que el año lo tengo muy bien cumplido pero también sé que tengo otra gran oportunidad para estar ahí, tocando el arco iris. He estado siempre supercerca de ganar en los Mundiales, con capacidad para poder ganar. Noto la experiencia de otros años, una tranquilidad extra, me siento, también en el terreno personal, más liberado, más tranquilo. Vengo a este Mundial más seguro, es un Mundial bueno para mí, pero mentalmente pensando que ahora puedo hacer algo importante.

P. Pero para eso tendrá que ponerse de acuerdo con Freire, que es tricampeón mundial, y Samuel Sánchez, campeón olímpico... Los últimos años, Salzburgo, Stuttgart, Varese, España no ha funcionado como equipo...

R. A lo mejor no había ideas claras de quién era el líder. Este año estamos muy bien los nueve.

P. ¿Ha hablado con Freire y Samuel?

R. Todos sabemos cómo estamos, cómo está uno mismo y cómo están los demás. Óscar es un poco incógnita, pero sabemos que también está muy bien. Y todos sabemos que el más rápido para la llegada que se puede dar, de un grupillo, y a lo mejor Freire no está para tanto, soy yo. Entre Samuel y yo, en condiciones normales, soy más rápido. Tendría que estar él para mí...

P. Pero cuando hay dos españoles en el grupo final siempre hay uno que ataca antes de llegar, bajando, en un repecho...

R. Bueno, en Mendrisio no hay muchísima bajada... Sí, nos cuesta jugárnosla a una sola baza. A ver si sabemos mentalizarnos y hacer las cosas bien. A mí me gustaría ganar yo, pero lo importante es que el oro se quede en la selección. Estoy capacitado para poder hacerlo. Seremos capaces de ponernos de acuerdo, seguro, durante la carrera lo haremos. Nos vamos a entender.

P. ¿Qué rivales ve?

R. Cunego, que ha ganado dos etapas en la Vuelta, va a estar muy bien, a Cancellara no le va mal el circuito: es duro, pero ya vimos cómo humilló a sus rivales en la contrarreloj... Evans, Andy Schleck, la gente de Pekín, Simon Gerrans, Ballan... Jugadores de ataque.

P. ¿La victoria, el valor simbólico del arco iris, le serviría para armarse definitivamente ante el CONI, para callar bocas?

R. Ganar el Mundial sería más importante si cabe por todo esto, pero ¿qué más puedo ganar para demostrar algo? Este año he ganado la Vuelta, 21 días dando el callo, Dauphiné, la Volta, Madrid, Burgos, etapas por todos los sitios, siempre adelante, en Lieja... Me salga bien o me salga mal el Mundial yo estoy muy tranquilo como estoy. Yo no tengo que callar bocas a nadie, con que yo me quede contento me sobra.

Alejandro Valverde, esta semana durante un acto promocional en Madrid.
Alejandro Valverde, esta semana durante un acto promocional en Madrid.EFE

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Sobre la firma

Carlos Arribas
Periodista de EL PAÍS desde 1990. Cubre regularmente los Juegos Olímpicos, las principales competiciones de ciclismo y atletismo y las noticias de dopaje.

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