Público
Público

"Al que dé positivo hay que suspenderle de por vida"

Hace una semana Valverde aún no había sido sancionado y Pereiro se mostrada inflexible con los ciclistas que se dopan

IGNACIO ROMO

Óscar Pereiro es un hombre unido de por vida al dopaje. En su caso, felizmente. Cuando Landis fue desenmascarado, se convirtió en rey del Tour de 2006.

¿Cómo recuerda ese Tour?

Lo claro es que el primero de los legales fui yo. Fue una paradoja ir de amarillo toda la semana menos él último día. Las normas son así: si un corredor hace trampa, se tiene que ir a casa y se corre el orden.

¿Estamos viviendo ahora el ciclismo más limpio?

Está claro que sí. Es la época de mayor igualdad. Armstrong dicE que 'para jugársela ahora hay que ser jodidamente estúpido'. Hoy no hay quien se salte un control. Pero es verdad que se pasa por encima de los derechos de las personas. Yo he estado a las siete de la mañana desayunando con mi hijo, él tomando su leche con galletas y a mí sacándome sangre. He pasado tres controles en las últimas tres semanas, en mi casa. Lo vería más normal si fuera para todos los deportes. El dopaje existe en todos los deportes. Hay trampas en la sociedad, hay gente que quiere engañar a Hacienda cada día. Pero el ciclismo da esta sensación porque luchamos contra ello, y nos dañamos a nosotros mismos. Y nos cuesta dinero: cada equipo paga 120.000 euros al sistema antidopaje. Pero lo veo bien, y eso de estar localizado una hora al día es una buena idea.

¿Cuántos controles ha pasado en el último año?

15 fuera de competición y quizá otros 15 en competición.

¿El ciclismo no reacciona ante los casos de dopaje con un punto de complicidad?

Mire, yo he vivido en mis carnes perder la gloria en el Tour porque otro se dopó. El ciclismo es un deporte de equipo y no siempre se dice lo que se piensa porque hoy estás aquí y otro día puedes ser compañero de uno que se dopó. El atletismo, por ejemplo, es diferente. Y yo soy muy claro. Mi opinión es que a los ciclistas que den positivo hay que suspenderlos de por vida. Ni dos años ni nada. Al que da positivo por EPO, o por transfusión, sanción de por vida. Esa gente no se merece volver.

¿La CERA fue una sorpresa?

Mire, yo me reí mucho en el último Tour. Me dijo un corredor que había habido un positivo con la indetectable. Y yo decía: '¡vaya, entonces no será indetectable!'.

¿Y la Operación Puerto?

Me quedé un poco jodido porque sólo ha salido malparado el ciclismo. De 200 deportistas, sólo han aparecido 50 ciclistas. ¿Y el resto? O se abre el libro o se cierra. Han pasado tres años y seguimos con la misma mierda.

Armstrong se ha borrado de la lista de favoritos al Giro...

Yo creo que el Giro nunca fue su objetivo: quiere ganar el Tour. Necesita el Giro para coger kilómetros y afinar. Lo va a usar como preparación. Si se implica en el Giro, no se recuperará para julio.

¿Cree que puede ganarlo?

Sí. No me puedo imaginar a Armstrong saliendo para quedar décimo. Lo que sí creo es que si no se ve en forma para ganar, es posible que ni siquiera lo corra. Y hoy hay miles de datos para ver tu estado. Lance sabe cuál es el mínimo de watios por kilo de peso que tiene que mover para estar delante. Si Armstrong gana el Tour, se va a cachondear de todos nosotros.

¿Le cae bien Armstrong?

Mire. Yo solía ser crítico con Lance, no alababa su forma de ser. Era estirado, iba por encima del resto... Sin embargo, coincidí con él en enero, en Australia, y me di cuenta de que estaba equivocado. Con él, el ciclismo ha vuelto a las portadas. Y le he visto más humilde, se relaciona más. Pero su vuelta es arriesgada porque la gente sólo se va a acordar de éste último Tour.

¿Vuelve por ambición, por la lucha contra el cáncer o porque piensa que los que ganan ahora son peores?

Exacto, esto último. Para mí ésa es la clave. Él veía el Tour en su rancho, pillaba tiempos y decía: 'yo puedo subir más rápido que éstos, soy superior todavía'.

¿Te ha resultado interesante esta noticia?