La Setmana Catalana se ha suspendido este año, a la Vuelta a Aragón es muy probable que le pase lo mismo. ¿Qué le parece todo esto?

Que no van a ser las únicas carreras que van a tener problemas. Al paso que vamos van a ser muchas las que no puedan salir adelante. Van a terminar matando a la gallina de los huevos de oro.

¿Por qué piensa esto?

Porque el ciclismo está fatal y cada día marcha peor. Ya no somos el segundo deporte en España. Nos ha pasado la Fórmula 1, las motos y no sé si también el baloncesto, el balonmano y el fútbol sala.

¿Qué opina del ProTour?

No estoy para nada de acuerdo con este sistema. ¿Por qué el Kelme se ha tenido que quedar sin correr el Tour? No tiene ningún sentido. Es que en el fútbol sólo importan el Madrid y el Barcelona. Solos no pueden jugar. Los demás equipos también tienen que contar. Hay una persona que ha montado todo esto. Todos lo sabemos, pero yo no lo digo.

¿Y sobre que las tres grandes vueltas quieran hacer la guerra por su cuenta?

Pues quizás esa pueda ser la revolución que le hace falta al ciclismo para intentar volver hacia arriba. Porque yo veo el futuro cada día más complicado. Las casas comerciales están dejando al ciclismo para marcharse a otros deportes por cosas como estas y como el dopaje.

¿Qué opina de ese asunto?

Pues que está haciendo mucho daño. Yo estuve corriendo dieciocho años, pero parece que ahora hay ciclistas que quieren hacer toda su carrera en dos temporadas.

¿Su carrera también tiene problemas para subsistir?

No los tiene porque estoy yo. Pero el día que se vaya Bahamontes seguro que desaparece la Vuelta a Toledo. Eso lo tengo muy claro.