MUNDIALES DE RICHMOND | VALVERDE

“Igual es mi última oportunidad para conquistar el Mundial”

A sus 35 años, Alejandro Valverde todavía persigue el sueño del maillot arcoíris. Lleva conseguidas dos platas y cuatro bronces, récord histórico.

0
“Igual es mi última oportunidad para conquistar el Mundial”

¿Cómo afrontará la cita mundialista tras los esfuerzos del Tour y la Vuelta?

—Creo que me encuentro bastante bien, con buenas sensaciones y adaptado al horario, pese a que en la Vuelta acabé un poco tocado por la caída y el desgaste acumulado de dos grandes seguidas. Sin embargo, descansé, recuperé, me entrené con un plan suave y me noto en un buen momento de forma. Y, sobre todo, muy motivado.

—En este 2015 logró uno de los grandes objetivos de su trayectoria, el podio del Tour. En el Mundial tiene más medallas que nadie, pero le falta el oro.

—Sí, conseguí el tercer puesto y cumplí un sueño. En los campeonatos del mundo ya sumo muchos podios, así que sólo me vale el maillot arcoíris. Ojalá lo alcance después de haberlo acariciado tantas veces.

—Con 35 años, ¿piensa que se trata de su última ocasión para ganar?

—Igual sí. El de trazado 2016, en Qatar, totalmente llano, me viene fatal. Y luego me voy a juntar con una edad que resultará más complicado. No obstante, no me obsesiona. En todos mis Mundiales he hecho lo que he podido y también he ayudado a vencer a otros. He disfrutado y tengo la plusmarca de seis medallas. Si consigo convertirme en campeón del mundo, genial. Si no, no me amargaré si me retiro sin el oro.

—¿Qué metal destacaría por encima del resto?

—La plata de Canadá, en 2003, porque fue mi primera convocatoria con la Selección absoluta. Además, hice segundo por detrás de un compañero, Igor Astarloa, que sacó el premio gordo. Viví una ilusión tremenda, me sentí como si hubiera ganado yo mismo. Guardo unos recuerdos preciosos.

—Después de inspeccionar in situ el recorrido, ¿cuál es su valoración?

—Bueno... regular. Pese a que cuenta con tres repechos de relativa dureza, y a que un Mundial se disputa contra los mejores y exige mucho, no lo habría diseñado así para mí. No es muy propicio, pero no hay duda de que me dejaré hasta la última gota de energía.

—¿Rivales?

—Los de siempre: Gerrans, Van Avermaet, Gilbert, Rui Costa, Nibali... Y al sprint, Degenkolb, Kristoff o Sagan.

—¿Y cómo se gestionará la Selección? ¿Habrá armonía?

—Mínguez me designó de líder, con Purito en la retaguardia. Entre Joaquín y yo no existe ningún problema, aunque dijera esas cosas algo inapropiadas en la Vuelta. Si no se rompe el pelotón, el más rápido del equipo es Lobato. Trabajaremos bien, y según cómo avance la carrera.