Ezequiel Mosquera Mínguez, de 34 años, de la localidad coruñesa de Cacheiras, en Teo, conversó con Siglo XXI horas después de finalizar la tercera etapa de la “Volta” a Cataluña, en la que no pudo aguantar el ritmo de los más fuertes, de Joaquim Rodríguez, Xavier Tondo y Luis León Sánchez. El gallego del Xacobeo-Galicia, que quedó cuarto en la Vuelta a España de 2008 y quinto en la de 2009, se mostró cauto a la hora de hablar del podio en 2010, una edición de la que destaca el recorrido. También comentó que vivió con incertidumbre el tiempo que se retrasó la concesión de la licencia profesional continental a su equipo y que nunca pensó en cambiar de colores.

Ezequiel Mosquera.

¿Cómo te has encontrado en estas tres primeras etapas de la “Volta” a Cataluña?

Regular. Voy mejorando pero hoy en la etapa, aunque no tenía final en alto, acumulamos, creo, 3.500 metros de desnivel, la gente cayó de madura, entre ellos yo.

“No me gusta hacer pronósticos porque el ciclismo no es un deporte para hacerlos”

Estás a 4:13 de Joaquim Rodríguez en la clasificación general. ¿Cómo afrontas lo que queda de carrera?

No vine al 100% porque, entre otras cosas, el recorrido no me beneficia mucho y porque la Vuelta al País Vasco y la Vuelta a Castilla y León me van un poco mejor. Teniendo en cuenta que están las tres seguidas, si vienes al 100% a la Volta pues seguro, muy seguro, que a Castilla y León ya llegas muy justo, por lo que es mejor entrar corto aquí para estar bien en las dos siguientes. A partir de ahí, pues hasta donde dure la forma para descansar ya de cara a septiembre

Un mes de septiembre en el que, un año más, está tu principal objetivo de la temporada, la Vuelta a España. ¿El año del podio?

Esa es la eterna pregunta. A todo el mundo le digo lo mismo desde hace años, no me gusta hacer pronósticos porque el ciclismo no es un deporte para hacerlos. El que manda es el cuerpo y el cuerpo es impredecible. Aparte de que tienes que responder tú hay que mirar la participación, los rivales. Hay que ir sobre la marcha. Como siempre digo yo, “vamos viendo, vamos viendo”. Iré con ambición, porque en este deporte si vas sin ella no vas a ningún lado, pero sin hacer cuentas precipitadas.

“El mismo día en el que Pino me dijo que había esperanzas para ir al Giro, salió que no nos invitaban”

¿Qué opinión tienes sobre el recorrido de la “Vuelta de la innovación”?

Me gusta porque tiene bastante montaña, menos kilómetros de contrarreloj, cimas inéditas como la de La Bola del Mundo o Cotobello, y alguna emboscada, cosas que siempre crean más expectación. En líneas generales, me gusta bastante.

El año pasado te perdiste a última hora el Giro de Italia por lesión y en el actual el Xacobeo no ha sido invitado. ¿Te queda la espina clavada de no haber podido correr la ronda transalpina?

Claro. Este año, encima, el día del prólogo en Lloret, Álvaro Pino me dijo que había estado hablando con gente de allí y que igual había alguna esperanza, pero justo ese mismo día por la tarde salió que no nos invitaban. También han dejado fuera a otros equipos italianos importantes, lo que demuestra que es difícil entrar en esas invitaciones. Es algo que desde el principio del año teníamos asimilado. Habrá que pensar en lo que tenemos seguro, que es la Vuelta a España, y tratar de hacerlo bien por la continuidad del equipo y para optar a correr mejores carreras en 2011.

“Tenía claro que, por lo menos en 2010, iba a correr la Vuelta con el Xacobeo”

La concesión de la licencia profesional continental a tu equipo, el Xacobeo-Galicia, tardó más de lo esperado. ¿Cómo viviste aquella situación?

Fue un invierno difícil. Por ello, en parte, y no es por buscar excusas, el rendimiento del equipo se vio mermado en el principio del año porque había mucha incertidumbre, no sabíamos qué íbamos a hacer o qué carreras íbamos a correr. Desde el punto de vista del ciclista, no sabes por dónde vienen los tiros, no sabes qué pasa realmente, y como la dirección del equipo estaba ocupada en temas burocráticos, bastante tenían, pues tampoco hubo mucho tiempo para planificar la temporada para cada uno. En circunstancias normales, cada corredor tiene su época del año en la que tiene que estar bien y hasta mediados de enero no sabíamos nada, lo que se ha notado a la hora de empezar a correr. Ahora, que ya hemos empezado a acumular competición, en este mes que entra seguro que habrá resultados.

Durante ese tiempo, ¿pensaste en cambiar de equipo?

No, estaba seguro de que era algo que se tenía que solucionar. Somos un equipo que tenemos una administración detrás, que pesa, y yo, aunque puedes tener alguna duda, estaba, más o menos, con la cabeza tranquila. Si el equipo no hubiera tenido al final la licencia continental profesional pues, evidentemente, me lo tendría que haber planteado, pero en ningún momento pensé en ello, porque tenía claro que, por lo menos en 2010, iba a correr la Vuelta con el Xacobeo.