EL CICLISTA ESTÁ EN EL PARO POR LA OPERACIÓN PUERTO

Beloki: "Nos están matando sin posibilidad de defensa"

Josu Garai

Tres veces podio del Tour (tercero en 2000 y 2001 6 segundo en 2002) y máximo rival de Armstrong en la ronda gala de 2003, hasta que se cayó, Joseba Beloki se encuentra sin equipo por culpa de la Operación Puerto, que este miércoles cumple un año.

-¿Qué es lo primero que le viene a la cabeza cuando oye hablar de la Operación Puerto?

Que estoy en el paro, sin poder correr. Y que un año después de que empezara todo, mucha gente, no sólo yo, se ha quedado sin trabajo: no sólo ciclistas, también auxiliares. Muchas familias están en la calle.

-Su nombre está en las listas

Sí, mi nombre aparece en las listas y nadie me dice porqué. No tengo, o mejor dicho no tenemos, ninguna acusación directa de nadie, pero este tema nos está haciendo tanto daño que estamos deseando que al final alguien nos acuse de algo, de lo que sea, para que al menos nos podamos defender.

-Se siente indefenso

Sí, absolutamente. Echamos la culpa de todo lo que está pasando a la UCI, a los equipos, a la RFEC, al CSD..., pero la verdad es que nadie nos ha mandado una carta diciéndonos de qué nos acusan o si nos hemos dopado. Mientras, sin embargo, nuestros nombres siguen ahí, sometidos al escarnio público un día sí y otro también. Y no sabemos por cuánto tiempo ni cómo salir de ésta.

-¿De qué exactamente le culpan a usted?

Yo estoy ahí por una planificación, una hoja en la que aparecen las iniciales J.B. Pero nadie me ha llamado para saber si me corresponden. Es una planificación del año 2005 y, por eso, toda mi carrera está ahora en entredicho. Nos están matando sin posibilidad de defensa.

-¿Y no es suya?

No. Cualquiera que sepa un poco de esto sabe que no es mía, porque yo ese año iba a correr las tres grandes, todos lo publicásteis... Y por más cosas. Pero, sin pruebas de ningún tipo, me cargan con esas iniciales y, sólo por eso, han roto mi carrera deportiva. Que demuestren que soy yo... Por eso quiero un proceso, para que al menos me pueda defender.

-¿Es inocente?

Sí, y así se lo expliqué al juez cuando fui a declarar.

-¿Hay muchos inocentes en la lista de la Operación Puerto?

Sí, muchísimos, y yo pondría la mano en el fuego por alguno de ellos. Cuando todo se aclare, aunque pasen diez años, se verá que se han cometido verdaderas injusticias. Para entonces, no obstante, nos habrán jodido nuestras carreras deportivas, pero ¿qué podemos hacer? Ahora mismo seguimos sin poder defendernos y sin poder demostrar la inocencia.

-¿Se siente acabado?

Yo quiero correr. Sabía que mi vida de éxitos había acabado con la caída del Tour de 2003, pero quería y quiero retirarme con un nivel digno. Nos están obligando a tomar una determinación agresiva, que no va a gustar a mucha gente... Tenemos que hacer ruido, ir al ataque, porque así no podemos seguir, somos un colectivo muy dañado y al menos a mí me gustaría poder correr en 2008. No quiero que suene a amenaza, pero tenemos que hacer algo.

-Pero no todo son mentiras en la Operación Puerto, hay pruebas, hay bolsas de sangre...

Si tan claras están las cosas, ¿por qué no nos han juzgado ya? ¿Por qué no nos abren expedientes? Si lo tienen tan claro, que den leña, sin compasión, con dureza, cumpliendo las leyes y el reglamento. Yo sabía que el Beloki de antes de la caída ya no iba a verse más, como así ha sido, cuando si fuera verdad lo que insinúan de mí tenía que haber andado como una moto.

-¿Había dopaje organizado en su equipo?

No, todo lo que se ha dicho o insinuado a este respecto es mentira, al menos hasta donde yo conozco. Por el contrario, lo que ahora muchos equipos han empezado a hacer, controlar a sus corredores internamente, Manolo lo hacía desde hace mucho tiempo, aunque sin dar publicidad.

-¿Siente que toda su carrera está entredicho?

Más que mi carrera, mi nombre. Han ensuciado injustamente mi nombre. Antes iba por la calle y me sentía una persona admirada y querida, me llamaban de muchos sitios... Ahora todo eso se ha acabado, la gente tiene dudas y en vez de ver al Joseba Beloki que sufría y se retorcía sobre la bicicleta ven a un posible tramposo. Somos como apestados, y todo gracias a la Operación Puerto.

-¿Sigue cuidándose?

Sí, yo sigo haciendo vida de ciclista porque me gustaría correr en 2008. Y quiero estar preparado por si alguien me da la oportunidad de correr. No puedo irme así del ciclismo, mi corazón me dice que en 2008 voy a tener un equipo, aunque mi cabeza no lo ve tan claro.

"Esto es mucho peor que la caída del Tour"

En 2003, tras la durísima caída que sufrió en el descenso de La Rochette, camino de Gap, cuando empezaba a tutear sin complejos al mismísimo Lance Armstrong, Beloki pensaba que ya no podía tener más mala suerte, pero la vida le ha deparado una desagradable sorpresa. "Esto es mucho peor", confiesa. "Entonces me consolaba diciendo que había sido culpa mía, pero ahora no sé ni a quién ni a dónde acudir".

Lo que le saca de sus casillas, no obstante, es que "unos puedan correr y otros no", estando como están en la misma lista. "Es una locura, nada tiene sentido, empezando por el dossier de la Operación Puerto", que conoce de memoria. "Inculpan a unos sin pruebas y pasan por alto las de otros. Por unas mismas iniciales, hay dos corredores en la lista. ¿Cómo se explica esto? Es sólo un ejemplo de los muchos que se podrían poner".

Beloki, sin embargo, se muestra reacio a dar su ADN para demostrar su inocencia. "Es que no por ser ciclista tengo que perder mi dignidad y no quisiera que mi ADN vaya pululando de un ordenador a otro. No estoy de acuerdo con darlo, aunque no digo que al final, si sirve para algo, no lo vaya a dar. Pero de darlo, se lo daría a quien debo dárselo, a quien me ofrece garantías, no a la RFEC o a la UCI", sino al juez. "Sé que algunos pueden dudar de mí por esta forma de pensar, pero ¿qué más puedo perder si muchos ya me han juzgado y condenado?"